NURR-ULA enfrenta crisis nacional con sapiencia y trabajo en equipo

*** Al cumplir 46 años, la ULA-Trujillo no desmaya en sus objetivos de formar a las nuevas generaciones y contribuir a la solución de problemas sociales. Integrantes de la comunidad universitaria enfatizaron que mientras exista crecimiento intelectual, unión e integración habrá un mejor país

Tal como los hijos imitan a sus padres, el Núcleo Universitario “Rafael Rangel” (NURR) adopta la postura asumida por la Universidad de los Andes (ULA), pues pese a la crisis no cierra sus puertas, aviva  el conocimiento, la esperanza y la libertad. La Villa Universitaria, la Casa Carmona, la Extensión Boconó, entre otros espacios ulandinos en la región trujillana, reflejan el accionar cotidiano de trabajar a favor del desarrollo nacional, donde la academia, acompañada de sapiencia, cordura, hermandad, respeto, extensión e investigación son prácticas comunes al buscar soluciones y/o alternativas en tiempos difíciles.

Compromiso totalmente ratificado este 23 de junio, cuando se cumplen 46 años de la consolidación de un visionario sueño académico, iniciado por el Doctor Antonio Luis Cárdenas, y que, aunque exista una marcada coyuntura política, económica y social, abre camino a nuevas etapas, con mención especial en luchar, con el corazón e inteligencia, por una gran dama llamada Venezuela, así como por uno de sus parientes, Trujillo.

Opiniones ulandinas

Ante el vigente panorama, el equipo de Prensa ULA-Nurr consultó a integrantes de la comunidad rangeliana sobre ¿cuál es rol de la universidad en tiempos de crisis?, habiendo reiteradas coincidencias en la necesidad de mantenerse activa, dispuesta a contribuir con el país, en ser el epicentro del saber, al mismo tiempo de defender los preceptos democráticos y constitucionales. Para el vicerrector Efrén Pérez Nácar, el NURR da la cara en tiempos de crisis, no se amilana, siempre está presto a formar, capacitar e instruir a las nuevas generaciones de profesionales.

Alegó que “llegamos a 46 años de vida académica, de vida activa, de contribución a la sociedad y de cumplirle a Trujillo; estamos llamados a trabajar con la calidad que nos caracteriza, además, en ser una ventana hacia la esperanza del pueblo venezolano”. Por su parte Marilys Cote, coordinadora de Secretaría, señaló que las adversidades no han sido obstáculos para que el NURR sea referente en investigación, dentro de la ULA y fuera de ella, lo cual es un orgullo regional.

Desde su óptica, el transitar ha sido difícil en los últimos años, sin embargo, se logró la consolidación de la Extensión Boconó, ahora, la universidad, adecua la modalidad de estudio a las nuevas tecnologías de la comunicación e información, y también los diseños curriculares, acorde a las exigencias del siglo XXI.

En la actualidad, Valeria Campos, cursante del cuarto semestre de Educación, mención Lenguas Extranjeras, es la estudiante con mayor índice académico, y consideró que “las crisis son transitorias, es imposible pensar abandonar nuestro segundo hogar, la universidad, debemos comprender que las salidas democráticas se encuentran en tan querido recinto, en las personas e intelectualidad”.

César Palencia, quien obtuvo el más alto puntaje de la Promoción “Alí Medina Machado”, a egresar este 13 de julio, opinó que el NURR es por excelencia “un espacio para la diversidad del pensamiento, es la ventana que muestra la verdad, la luz, donde es posible aprender, mejorar habilidades y moldear a los próximos profesionales”.

El profesor Luis Peña indicó que “sentimos lo que ocurre en la universidad porque somos universitarios, conocemos su esencia, la apreciamos, defendemos su autonomía, libertad y apostamos para que el Núcleo vuelva a convertirse en lo que era en otrora”.

Rol protagónico

Al ser consultada, Evelyn Urbina, jefa de Relaciones Interinstitucionales, destacó que la ULA-Trujillo “es un espacio abierto al debate, aquí nos expresamos y pueden surgir ideas, por ejemplo en la formación de líderes, dar soluciones, enfrentar vicisitudes e injusticias, siempre recordando que mientras haya crecimiento intelectual tendremos una mejor nación”.

Según Claret Márquez, secretaria ejecutiva del Consejo de Núcleo, el rol de la universidad “es fundamental porque pretende siempre desarrollar los conocimientos de la sociedad, generar talento humano para contribuir al país”. Otro en pronunciarse fue Pablo González, secretario de la Unidad de Prevención y Seguridad, quien aplaude el coraje y valentía institucional de evitar el cierre, con la finalidad de ofrecer oportunidades de estudio; asimismo, invita a luchar, con unidad y perseverancia.

“El Núcleo está con la mano de Dios”, es la opinión de Rosa Valderrama, trabajadora adscrita a los Servicios Bibliotecarios del NURR (SerbiNurr), quien precisó que aunque persisten un cúmulo de inconvenientes externos e internos, la jornada laboral más la atención otorgada a los estudiantes está signada por el cariño junto a las ganas de ser creativos.

Universidad negada a morir

En nombre de la dirigencia estudiantil, Ender Ramírez, exhortó a “no dejar que la universidad muera, es perentorio ser optimistas, no renunciar a los sueños ni permitir que nada ni nadie coarte el bienestar nacional”. Por su parte Lisa Peña, encargada de Telecomunicaciones, adicionó que las claves son “el apoyo mutuo, sentido de pertenecía, apoyo constante y no quedarse de brazos cruzados, de lo contrario la universidad se derrumbará”.PRENSA ULA-NURR / Gilcely Linares (CNP 15.221)